Y sin previo aviso se inundó de pequeñas culebras que vomitaban a sus diminutos hijos. Logró el recinto salvarse de la asfixia con un escape ideado por la bombillita que colgaba del centro del techo. Las ventanas, un tanto húmedas, se hayaban molestas por la viscosidad de los caracoles que copulaban en sus alféizares y germinaban de sus conchas lirios que emitían pequeños cubitos de plástico. Derretíanse por el fuerte calor que emanaba de las antenitas de las hormiguitas, las cuales andaban de un lado para otro cosechando trozos de piel, la cual había sido arrancada de los padrastros de un anciano que se los comía desde la esquina, al lado de la máquina de coser, observando el panorama provocado por el fuerte medicamento de la gripe. ¿O era Alzheimer?
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3 comentarios:
Esto.... te dejo el comentario para que veas que me paso, y soy un entregado a la lucha de los blogs...pero sinceramente...de que va el tuyo??? XDDD
Un granaino llamado PETER..
Por cierto, lo e entendido y mola mil
Despues de leerte por un tiempo me decidi a comentarte para decirte que tenes un fiel lector que espera sigas con t us buenas letras.
te felicito y espero pueda seguir leyendote
barbie
Hola hola yo soy de Tucuman Argentina y lo que me llevo a tu blog es la casualidad, el destino, como quieras llamarlo jaja simplemte llegue basando blog y me intereso lo que escribias y me quede jaj espero sigamos en contacto para seguir promoviendo la literatura juvenil
un abrazo
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